Lo que viene: mini autos plegables
Cómo es el primer “auto plegable” que erradica la pesadilla de conseguir estacionamiento
El modelo de mini auto, desarrollado por una empresa de Israel, llegará en 2024 y ya se pueden hacer reservas para comprarlo con descuento
Sol Valls para LA NACION
CT-1 aparece como una solución de micromovilidad que mantiene la esencia de los autos tradicionales
Aun año desde su debut en Munich, la startup israelí City Transformer oficializó el futuro lanzamiento del primer mini-auto eléctrico y plegable de la historia. Así, la micromovilidad de la nueva era agrega páginas a su capítulo.
Además de ser éticamente correcto por su condición de 100% eléctrico, el City Transformer (CT-1) pone fin a la atormentadora realidad urbana de tener que gastar tiempo y energía en buscar un lugar digno para estacionar. El CT-1 está basado en la arquitectura modular de monopatín con ajuste activo, lo cual le permite plegarse desde un ancho de 1,4 metros hasta una medida ultracompacta de un metro. Además, este cambio puede realizarse en movimiento, durante la conducción, de manera que no es necesario frenar el auto y perder tiempo en poner en marcha el ajuste. El fin del proyecto de movilidad, según la startup, es que sea el auto el que se adapte a la vida urbana del conductor, y no la inversa.
Estudios demostraron que el conductor de alguien al volante de un CT-1 tendrá 10 veces más probabilidades de conseguir estacionamiento que con un auto normal
El CEO de City Transformer, Asaf Formoza, cuenta que la idea le surgió cuando se mudó a vivir a Tel Aviv hace una década. “Me sorprendió lo densamente poblada y congestionada que estaba la ciudad y estaba harto de perder más de una hora al día en el tráfico o buscando estacionamiento, o ambas cosas”. Formoza cuenta que tras pasarse a la moto y comprender que no era el vehículo ideal por las condiciones climatológicas y por seguridad (“estuve involucrado en un accidente grave”), decidió buscar una solución de movilidad que permitiera “tener las ventajas que ofrecen tanto el auto como la moto”.
Cómo es el CT-1
Con apenas un metro de ancho y 590 kilos, el CT-1 cuenta con dos motores eléctricos y un pack de baterías, cuya masa es un 80% menor que el estándar de baterías de vehículos eléctricos. Con una carga, el mini-auto logra una autonomía de hasta 180 kilómetros, y el tiempo de recarga del 10 al 80% requiere solo media hora.
En materia de potencia y velocidad, en su modo “desplegado”, el CT-1 alcanza una velocidad máxima de 90 kilómetros por hora, mientras que plegado el límite se reduce a 45 kilómetros por hora, por cuestiones de estabilidad. En ambos modos, el vehículo entra dentro de la categoría de los biplaza, porque tiene espacio para dos personas, dispuestas longitudinalmente.
Plegado llega a medir apenas un metro, y su carga rinde 180 km
Formoza asegura que la función de cambiar de tamaño en movimiento no presenta ningún peligro. “La seguridad es un aspecto fundamental en el que City Transformer nunca hará concesiones. El CT-1 tarda solo unos segundos en transformar inteligentemente su anchura y es un proceso totalmente seguro”. Además, el directivo aclara que se trata de un vehículo de categoría L7e, por lo cual es obligatorio tener licencia de manejo para poder usarlo.
En cuanto al resto de las medidas, el modelo tiene 2.5 metros de largo; 1,58 metros de alto; y una distancia entre ejes de 1,8 metros.
En su interior, el modelo incluye un climatizador, una pantalla que permite ver el estado de los marcadores de carga, y un sistema de infoentretenimiento.
Más micromovilidad, menos congestión
Lejos de ser casual, el nombre otorgado al innovador invento de la startup de medio oriente es representativo. El término “transformer” alude a la capacidad del CT-1 para cambiar su morfología en movimiento; resolviendo así una de las pesadillas de la movilidad urbana más recurrentes.
Según demostraron estudios llevados a cabo por la empresa, los conductores del CT-1 tendrán 10 veces más posibilidades de encontrar lugar para estacionar que un auto normal.
El beneficio es doble porque, al garantizar facilidad para encontrar lugar para estacionar, así como para agilidad y rapidez para circular en las calles, el conductor puede reducir sus tiempos de manejo y minimizar la demora de los embotellamientos o calles trabadas. Además, estas mismas ventajas permiten reducir el consumo de electricidad de la batería, variable clave a la hora de hacer el gran paso hacia la movilidad eléctrica.
En definitiva, el proyecto aparece como una nueva opción de micromovilidad que, a diferencia de otras, no supone el abandono del concepto del auto. Atendiendo el problema cada vez más generalizado de la falta de espacio para circular y estacionar de las grandes urbes, el CT-1 propone un modo de moverse práctico y superador que se inserta en el sistema sin requerir cambios gigantescos de él.
Cuándo va a llegar al mercado
Después de pasar por siete etapas de desarrollo, desde el inicio del proyecto en 2014, City Transformer oficializó que las imágenes publicadas del CT-1 son el diseño final de la nueva joya de la micromovilidad. El vehículo hoy está en fase de homologación, que requerirá aproximadamente un año más de espera; y la producción en serie va a empezar en 2024.
Sin embargo, de algún modo la comercialización ya comenzó. Con un depósito reembolsable de 150 euros, se puede hacer una reserva online del CT-1, jugada que permitirá -una vez en el mercado- adquirirlo a un precio bonificado de 12.500 euros, según la empresa