Mal día comercial
LPO19/10/2020
El Día de la Madre lejos estuvo de aliviar al comercio, tras largos meses de números negativos por la crisis económica y la pandemia. Las ventas se desplomaron un 25,1% en relación a las cifras de 2019, en el tercer año consecutivo de baja.
La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) estimó que «los faltantes de mercadería, los ingresos insuficientes en los hogares, el temor a que la situación económica empeore, los protocolos estrictos para ingresar a los locales físicos y en algunas localidades las restricciones que todavía existen para circular, afectaron fuerte la venta».
La caída de este año es la tercera consecutiva en esta tradicional fecha, ya que en 2019 hubo una merma del 12% respecto a 2018 y, ese año, el descenso fue de 13,3% en relación a 2017, último año en que los registros de la entidad observaron un leve crecimiento del 1,1%. «Ya la temporada pasada la fecha había sido muy pobre por la recesión económica. Y este año se profundizó esa dificultad con la crisis sanitaria», indicó la CAME.
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En la ciudad de Buenos Aires, la apertura de los shoppings, que no fueron medidos en el relevamiento, «restó operaciones a los negocios de barrio», explicó CAME.
En relación a esto, desde la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI) resaltaron que las ventas en estos puntos polirrubros tras siete meses de inactividad, pudieron ayudar al repunte de la inédita caída del 85,1% interanual registrada en julio en los centros de compra.
Asimismo, las ventas registradas este año por el Día de la Madre, reflejaron una situación que también fue advertida por la Cámara de la Industria del Calzado (CIC), que observó que su rubro viene de «cuatro años de caída consecutiva «, con fuerte baja de la producción, suspensiones y despidos.
Otro de los factores que contribuyeron a la baja en las ventas, fue adjudicado por la entidad empresaria a la disminución de los encuentros personales derivados de las restricciones, lo que, según su criterio, provocó «una falta de regalos».
Sin embargo, CAME consideró «posible» que en los días siguientes puedan concretarse «algunas compras más», en un año que, en materia de obsequios calificaron como «muy malo», sobre todo en las ciudades que resultaron más afectadas por la pandemia de coronavirus.
En relación al faltante de productos, el relevamiento los detectó tanto en productos importados como en los nacionales que requieren insumos provenientes del exterior, como los cosméticos, perfumes, artículos electrónicos y electrodomésticos. «También escaseó stock en determinados modelos de celulares, que ya es un regalo común para esta celebración», remarcaron.
Las conclusiones de la entidad que nuclea a las pymes arrojaron que el 82,2% de los comercios relevados «finalizaron la fecha con bajas anuales en sus niveles de actividad».
Previo al relevamiento de la entidad, un informe realizado por el Instituto de Estudios de Consumo Masivo (Indecom), había reflejado una caída en la facturación de 41,7% respecto del año pasado