15 de Junio, en respeto a los adultos mayores
Aunque todas las personas de cualquier edad corren el riesgo de contraer Covid-19 las personas mayores tienen mayor riesgo de mortalidad y enfermedad grave después de la infección, y los mayores de 80 años mueren a un ritmo cinco veces mayor que el promedio, indicaron desde lla Organización de Naciones Unidas. «Se estima que el 66% de las personas de 70 años o más tienen al menos una afección subyacente, lo que los coloca en un mayor riesgo de impacto severo por el Covid-19», agregaron.
En 2011, la Asamblea General de las Naciones Unidas definió al 15 de junio como el Día Mundial de la Toma de Conciencia sobre el Abuso y el Maltrato en la Vejez. Desde entonces en esa fecha se recuerdan y visibilizan las desigualdades sociales que afectan a los adultos mayores.
Desde el mismo organismo recordaron que las personas mayores también pueden sufrir discriminación por edad en las decisiones sobre atención médica, triaje y terapias que salvan vidas. «Las desigualdades globales significan que, ya antes del Covid-19, hasta la mitad de las personas mayores en algunos países en desarrollo no tenían acceso a los servicios de salud esenciales. La pandemia también puede conducir a una reducción de los servicios críticos no relacionados con el Covid-19, lo que aumenta aún más los riesgos para la vida de las personas mayores», advirtieron.
Argentina
La pandemia por el coronavirus hizo que los prejuicios preexistentes que estaban latentes sobre las personas mayores, como su falta de productividad o su incapacidad para desenvolverse solos, se expresaran en el discurso y en medidas concretas, advirtió la reconocida médica gerontóloga Lía Daichman por el Día de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez, que se conmemora cada 15 de junio.
TRATAME BIEN. Desde la Asociación Con Voz realizaron una campaña para prevenir el maltrato en adultos mayores.
En ese contexto, este lunes se realizará un congreso virtual de 10 a 18 (hora argentina) bajo el lema «Nuevas formas de discriminación y maltrato en tiempos de Covid-19» que ya cuenta con más de 900 inscriptos, en el que se abordarán diferentes aspectos como el impacto socio-sanitario de la pandemia, la situación de las residencias, el abordaje mediático, entre otros.
Comprometida con las personas mayores desde sus inicios como médica, Daichman tiene una reconocida trayectoria a nivel nacional e internacional que incluye, entre muchos otros cargos, la actual presidencia del Centro Internacional de Longevidad (ILC) y la ex presidencia de la Red Internacional contra el Abuso y Maltrato en la Vejez (Inpea).
Actualmente, desde la sede Argentina del Centro Internacional de Longevidad (ILC) impulsó junto a otras organizaciones como Help Age International, la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría (SAGG), la Asociación Gerontológica Argentina (AGA), GerontoVida-, universidades y organismos públicos la campaña «Que florezca el buen trato» por el Día Mundial.
«Si bien avanzamos mucho, la pandemia nos demostró que todavía nos falta para erradicar el abuso y maltrato hacia las personas mayores», dijo Daichman.
«Lo primero que uno advierte es que en todos los países del mundo los gobiernos tomaron medidas en relación a las personas mayores que son indebidas e inconsistentes. En Argentina, cuando casi no había casos, lo primero que se dijo es que las personas de más de 65 años no tenían que salir de sus casas. Ni a hacer las compras, ni a trabajar, ni a cobrar, a nada. Pretender esto para alguien de 65 o 70 que hasta ese momento era completamente autónomo, que son la mayoría de las personas mayores que viven en la Ciudad de Buenos Aires, es inaceptable», explicó.
La especialista cree que se creó un miedo y un pánico en esa gente que todavía hoy cuesta revertir. «Yo trabajo como médica en una institución y veo que muchas personas mayores tienen tanto terror de salir que no hacen consultas. He tenido urgencias de pacientes que tuvimos que llevar a operar de la vesícula o que hicieron accidentes cerebrovasculares porque no habían hecho su consulta a tiempo. Esto es una locura porque la mayoría de los centros de salud está preparado con el área que atiende pacientes con Covid-19 bien diferenciada y no hay riesgo de contagio», aclaró.
Además, Lía Daichman hizo hincapié en que «no que hay que tener en cuenta es que una persona mayor no es un niño o niña». Y reflexionó: «Pensar que no va a saber qué hacer y por eso se tiene que quedar adentro es una mirada paternalista. Hay que tenerles confianza, son suficientemente responsables para moverse minimizando los riesgos de contagio».